Cómo vivieron su gira por España, su viaje a Latinoamérica, los numerosos programas a los que han asistido y un evento muy especial: el Gemeliers Weekend. Todo narrado bajo un punto de vista muy personal en el que los gemelos explican los mejores momentos y, también, algunos menos buenos. Las fans son lo más importante para ellos, y ocupan un papel importante en este libro. No se cansan de agradecer su apoyo y su incondicionalidad, y se sienten impresionados por lo que algunas son capaces de hacer para poder verles: esperar muchas horas a las puertas de cualquier firma, e incluso algunas que acampan a las puertas de sus conciertos para ser las primeras. Es por ello que se les ha dedicado un capítulo único a ellas (y ellos, ya que cada vez son más los chicos fans de Gemeliers). En el capítulo final la banda que les acompaña toma la voz, son los músicos que les han ido acompañando desde el primer concierto. Jesús y Dani ya están pensando en sus planes de futuro y así lo explican en el libro. Algunas pistas: quieren aprender a tocar algún instrumento y están preparando la reedición de su segundo disco que incluirá canciones en italiano.
“MIL Y UNA NOCHES”, EL SEGUNDO ÁLBUM DE GEMELIERS
El pasado 28 de abril Gemeliers publicaron su segundo álbum “Mil y una noches” bajo el sello de Pep’s Music Group. Once canciones que siguen su línea musical, basada en ritmos latinos. En este disco se ve una evolución. “Acabábamos de cumplir dieciséis años y nuestras voces ya estaban cambiando. Como nos dicen los entendidos, “han madurado”. ¡Igual que nosotros! ¿O no? Pues claro que sí, porque tanto trabajo te hace madurar, o eso pensamos”. La grabación del disco la compaginaron con sus estudios, algo que ellos nunca han dejado de lado pese a la vida tan ajetreada que llevan. “Para el poco tiempo que tenemos para estudiar y para ir a clase, nos va verdaderamente bien. Para que os hagáis una idea: como el último mes del pasado curso no pudimos ir a clase nos quedaron algunas asignaturas, pero en septiembre, por supuesto, las aprobamos. Si nos queda alguna asignatura es sólo por no poder ir al colegio, por estar siempre de gira, de un lado a otro con las firmas, sin parar un segundo. No por no haber estudiado”. Jesús desde pequeño quería hacer la carrera de medicina y Daniel ingeniería de montes y caminos. CRUZANDO EL CHARCO: LA GIRA POR LATINOAMÉRICA
Un gran momento en la vida de todo artista es cruzar el charco y promocionarse internacionalmente. En 2015 los hermanos Gemeliers dieron ese gran paso y actuaron en México, Ecuador y Colombia. “Estuvimos veinte días fuera de casa. Fue cansadísimo pero también superemocionante, porque vivimos experiencias increíbles. Hubo un día que nos levantamos en Quito, volamos hacia Guayaquil, desayunamos en México DF, comimos en Guadalajara y dormimos en Ecuador. Durante todo el viaje nos acompañó nuestra madre. La mayoría de veces nos acompañan los dos, papá y mamá, pero otras veces se alternan, y este viaje sólo podía venir uno”.En Ecuador estuvieron con el cantante más famoso del país, Maykel Cedeño, de su misma edad.
“Fuimos a una firma de discos en un centro comercial de la ciudad. La firma estaba muy mal organizada y aquello acabó siendo muy angustioso, la peor experiencia de nuestra vida. (…) A nosotros nos encanta el contacto directo con nuestras fans, poder darles la mano o un beso, hablar, pero ese día comprendimos lo peligroso que puede ser si no se controla. En el fondo aquello nos dio pena por las chicas, que sólo estaban intentando acercarse, tocarnos, que sueñan con eso”.
LAS FANS, EL MOTOR DE GEMELIERS
Las fans, las fans, las fans… No nos cansaremos de repetirlo: ellas son nuestra vida, nuestro apoyo, nuestro motor para seguir luchando, para trabajar cada vez más y mejor, para cantar con más ilusión aún. Sin nuestras queridísimas ‘Gemeliers’ nada de esto tendría sentido.Dani: En el segundo concierto, en el que erais más de dos mil fans, esa sensación tan alucinante de subirnos al escenario y veros allí se acrecentó todavía más cuando comprobamos que todas cantabais de memoria nuestras canciones. Jesús: Fue increíble. El primer disco había salido hacía apenas un mes y ya os conocíais todas y cada una de las palabras de nuestros temas. Flipamos entonces… y flipamos ahora. Aunque os parezca imposible, nos seguimos sorprendiendo y a veces no sabemos si vivimos en un sueño. Nos escribís las cartas más maravillosas del mundo, nos contáis vuestras penas, vuestras alegrías, vuestros problemas, sueños e ilusiones. ¡Si vierais la cantidad de cartas que conservamos! Cajas y cajas llenas de sentimientos, de emociones, de secretos. Os preguntareis si somos capaces de leerlas todas. Pues os vamos a responder: por supuesto que lo somos. Las vamos leyendo poco a poco, eso sí, porque es imposible leerlas justo cuando nos llegan. “Como nosotros somos muy guasones, y encima sevillanos, a veces las chicas mexicanas, tan dulces y educadas, no nos entendían y se tomaban a mal lo que les decíamos”.
EL GEMELIERS WEEKEND
Durante el mes de abril se celebró en el complejo de Los Ángeles el Gemeliers Weekend, un evento para fans en el que no faltó de nada: juegos, excursiones, cenas y, por supuesto, un concierto acústico en el que la pareja de hermanos tocó sus mejores canciones. Ellos mismos reciben a las asistentes, comparten actividades con ellas y cenan juntos. Algo que demuestra lo importantes que son las fans para Gemeliers. De esta experiencia cuentan muchas anécdotas, por ejemplo que mientras comían todo el mundo les hacía fotos, o que una chica le dijo a uno de ellos: “¡Ay, cómo masticas! Me enamoras…”. Cuentan que incluso alguna fan llamó a la puerta de su habitación en el hotel. “El último día fue un espectáculo. Se celebró una cena de gala y todos íbamos vestidos para la ocasión. De etiqueta. Nosotros con nuestro esmoquin y ellas superguapas, superlindas. Y en plena cena aparecemos los dos, en el escenario privado, y nos ponemos a interpretar unas canciones acústicas. Fue una auténtica pasada. Y sí, nos gustasteis todas, porque estabais todas guapísimas. Lo más surrealista, la verdad, fue el tema de las comidas. Se celebraban en una de esas típicas salas enormes donde caben muchas mesas. Había mucha gente, y a nosotros nos habían colocado en una mesa muy grande situada en una especia de altar. ¡Imaginaos! Había fans que, entre los nervios y que tenían las manos ocupadas con el móvil para hacer fotos, ni siquiera se preocupaban de mirar lo que tenían en el plato.Publicado el 27 de noviembre de 2015